Brasil recogerá unas 202 millones de toneladas de granos este año a pesar de la fuerte sequía que azotó algunas regiones del país y de las perspectivas de caída de la cotización de productos como soya y maíz por la súper cosecha de Estados Unidos, según el informe ‘Expedición Cosecha’ preparado por Gazeta do Povo y divulgado por la agencia EFE.
El estudio asegura que el área cultivada con soya este año en Brasil creció un 5.68 por ciento, especialmente por la retracción del 7.9 por ciento del área destinada al maíz y por la expansión de las plantaciones de la oleaginosa sobre pastizales y algunas áreas del ecosistema conocido como Cerrado, en el centro-este del gigante sudamericano.
“En esta cosecha verificamos que la producción brasileña entró en una nueva etapa y consolidó tasas de crecimiento más adecuadas al desarrollo del agronegocio nacional”, aseguró el coordinador del informe, Giovani Ferreira, citado en un comunicado. Sin embargo, el aumento del sector fue menor que el del año pasado, cuando la soya tuvo una expansión del 7 por ciento en el área plantada y registró una productividad récord.
A pesar de la caída del precio de la soya en el mercado internacional, que oscila en el límite de los 10 dólares el bushel en Chicago, los expertos prevén buenas cifras para el próximo año. También se espera una nueva cosecha récord de esta oleaginosa, de 91 millones de toneladas, que permitirá un incremento en las exportaciones del 46 al 48 por ciento en los próximos meses. En cuanto al maíz, los mayores productores fueron los estados de Minas Gerais, Río Grande do Sul y Paraná, todos con claras disminuciones en relación a la producción del año pasado por causa de la sequía que comprometió la entre-cosecha del cereal. El estado que más cayó en este ítem fue Paraná (21.7 por ciento vio reducida su área cultivada), por lo que bajó del primer al tercer lugar entre los estados maiceros del Brasil.
