Para mediados de junio fueron anunciadas las aperturas de dos nuevos restaurantes de Kentucky Fried Chicken (KFC) en las ciudades colombianas de Bogotá (centro) y Cali (occidente). Carlos Pinto, gerente de mercadeo de la multinacional en Colombia, aseguró al diario económico Portafolio que “va adelantada la construcción de otros siete puntos de venta adicionales: tres en Barranquilla (costa Caribe), dos en Bogotá, uno en Villavicencio (centro) y otro en Montería. Éste último será el primero en esa ciudad (capital del departamento caribeño de Córdoba, al noroccidente del país), lo que representa un paso adelante en nuestra expansión geográfica”.
El funcionario indicó también que están entre los objetivos de esta vigencia otras seis nuevas sedes, y para 2015 “posiblemente materialicemos nuestra incursión en nuevas ciudades, lo que iría en línea de nuestro proyecto de superar los cien restaurantes en Colombia al término del año 2018”.
Entre los desafíos para el crecimiento de KFC en Colombia, Pinto señaló la consecución de locales “ya que dependemos de la posibilidad de conseguir locales con un área que ronde entre los 300 y los 350 metros cuadrados”. De acuerdo con el mismo directivo, KFC Colombia invierte cada año cerca de diez mil millones de pesos (cinco millones de dólares) en la adecuación de locales, adquisición de equipos para cocina, sistemas para domicilios y otro frentes. El plan de expansión de esta empresa de origen estadounidense en el país comenzó en 2012, cuando abrió 8 locales, cifra que extendió a 11 a finales del año pasado.
