Bajo un nuevo formato de cuatro paneles de discusión moderados por conocidos periodistas colombianos que versarán sobre exportaciones, contrabando, presión urbana y políticas públicas, iniciaron este miércoles 1 de octubre los trabajos del XVII Congreso y Exposición Nacional Avícola organizado por la Federación Nacional de Avicultores (Fenavi), en Cartagena de Indias, Colombia, después de haberse creado ahí, hace 20 años, el Fondo Nacional Avícola.
Colombia es un país que produce 1.275 millones de toneladas de pollo y 11,000 millones de huevos al año, con un consumo de 27.1 kg y 236 unidades per cápita, respectivamente.
El eslogan del congreso de “Avicultura: la industria que alimenta a Colombia”, es muy pertinente, pues la industria avícola colombiana produce más de dos millones de toneladas de proteína animal de productos avícolas. Tan importante es, que las cifras se acercan a que el colombiano promedio consuma pronto más huevo que carne de res.
Además, Andrés Valencia, presidente ejecutivo de la Fenavi de Colombia, en su alocución de inauguración precisó que la industria avícola es sustento de los productores de granos forrajeros, impulsora de la industria de empaques… en pocas palabras, es la locomotora del sector agropecuario. Calculó que el valor de la industria es de 8 billones de pesos colombianos.
No obstante, ser productivo no es sinónimo de ser competitivo. Colombia se enfrenta a la dependencia del mercado internacional de granos, a la falta de infraestructura para transporte de materias primas y producto terminado, y al exceso de reglamentaciones. En cuanto al primer obstáculo, la firma del TLC con EUA ha sido crucial, pues ahora ingresan al país más de 2 millones de toneladas de maíz sin arancel. Por eso, Andrés Valencia hizo énfasis en “que no debe obstaculizarse el acceso a las materias primas, como en Venezuela”, país con el que enfrentan el grave problema del contrabando de 1,500 toneladas de pollo y 1 millón de huevos al mes. Con Ecuador también tienen el mismo problema, aunque menor.
El Sr. Valencia especificó además que “Colombia está llamada a ser potencia agropecuaria y despensa de alimentos para el mundo, pues hoy ocupa el lugar 23 de 223 naciones que pueden darse el lujo de expandir su área agrícola sin afectar el área de protección natural”.
