Coccidiosis, anticoccidianos y programas de rotación para aves

La coccidiosis es una enfermedad intestinal común que afecta a las aves en todo el mundo y que resulta en pérdidas económicas para los avicultores. Además, predispone también a los pollos a otras condiciones. Los anticoccidianos en el alimento han perdido su eficacia con la administración prolongada, por lo que los especialistas avícolas han recomendado la rotación de anticoccidianos.

Foto cortesía de Zoetis | Lesión +4 de Eimeria maxima: La pared intestinal puede estar inflamada en la mayor parte de su longitud, además de engrosada, con muchos coágulos sanguíneos y eritrocitos digeridos, lo que le da su color y olor putrefacto característico.
Foto cortesía de Zoetis | Lesión
+4 de Eimeria maxima: La pared intestinal puede estar inflamada en la mayor parte de su longitud, además de engrosada, con muchos coágulos sanguíneos y eritrocitos digeridos, lo que le da su color y olor putrefacto característico.

La coccidiosis es una enfermedad intestinal común que afecta a las aves en todo el mundo y que resulta en pérdidas económicas para los avicultores. Está causada por siete diferentes especies de parásitos protozoarios del género Eimeria.

En pollo de engorde, las especies que por lo general causan coccidiosis son E. acervulina, E. tenella, E. maxima y E. mitis. En aves de larga vida, las más comunes son E. necatrix y E. brunetti. No existe la protección cruzada entre especies. Dicho de otra forma, si un pollo desarrolla inmunidad contra la E. acervulina, no va a estar protegido contra otras especies de Eimeria.

Las coccidias son sumamente prolíficas y tenaces. Un ooquiste, es decir un huevo coccidiano, puede producir más de 500,000 de progenie en solamente 4 a 7 días, y con tan sólo unos cuantos ooquistes que se queden en la caseta o galpón avícola, es suficiente para infectar a la siguiente parvada. Los pollos ingieren a las coccidias de la cama, para luego replicarse en el intestino. Dañan el recubrimiento intestinal, lo cual entorpece la absorción de nutrientes.

Los ooquistes prosperan en ambientes cálidos y húmedos, aunque la coccidiosis es una amenaza para las granjas avícolas durante todo el año e incluso en climas áridos. 

Impacto de la coccidiosis

Los pollos que presentan la forma más grave y aguda de la coccidiosis debido a un nivel alto de exposición desarrollan diarrea hemorrágica y pueden presentar alta mortalidad. Sin embargo, es más común que lo pollos presenten la forma subclínica de la coccidiosis que resulta en baja conversión alimenticia, tasa de crecimiento y uniformidad de la parvada.

La coccidiosis predispone también a los pollos a otras condiciones, como la disbacteriosis, que es una inflamación de los intestinos, y a enfermedades tales como la enteritis necrótica, que es una inflamación intestinal debida a la bacteria anaeróbica grampositiva Clostridium perfringens.

En la necropsia, las lesiones intestinales causadas por la coccidiosis presentan una apariencia característica que ayuda al diagnóstico, la cual se puede confirmar por la presencia de ooquistes coccidianos en las heces o en los raspados intestinales.

Está ampliamente aceptado que la erradicación de las coccidias del ambiente de la caseta o galpón es difícil, sino es que imposible. Por lo tanto, en todas las explotaciones avícolas el control de los parásitos es una práctica estándar. 

Durante décadas, los anticoccidianos en el alimento han sido un medio efectivo de manejar la coccidiosis, pero con el uso repetido, las coccidias se han vuelto resistentes. Además, no hay en el horizonte nuevos anticoccidianos, lo que subraya la importancia de restaurar y conservar los productos existentes.

La vacunación se usa también para proteger a las parvadas contra la coccidiosis, la cual puede ser una valiosa adición al plan de rotación.

Necesidad de rotar y dejar descansar los anticoccidianos

Tradicionalmente, las explotaciones avícolas comerciales han usado dos tipos de anticoccidianos en el alimento: antibióticos ionóforos y compuestos sintéticos o químicos.

Todos estos productos han demostrado ser altamente efectivos en el control de los organismos coccidianos que causan la coccidiosis. No obstante, al igual que muchos productos terapéuticos que se usan en la medicina veterinaria o humana, algunos anticoccidianos en el alimento han perdido su eficacia con la administración prolongada. 

Por ese motivo, los especialistas avícolas han recomendado la rotación de anticoccidianos, es decir, el cambio de tipo utilizado después de uno o más ciclos de producción, o el intercambio de productos (programas "duales"), lo cual implica el cambio de anticoccidiano dentro del ciclo de producción (por ejemplo, el uso de un tipo en el alimento iniciador y de otro en el de engorde) para ayudar a conservar la efectividad de estos valiosos compuestos.

Además, la mayor parte de la industria avícola del mundo no ha visto en más de 15 años un nuevo anticoccidiano para el alimento. Sin productos nuevos en el horizonte, se ha hecho incluso más importante para las granjas avícolas utilizar con criterio los productos que hay y maximizar su efectividad.

¿Se practica la rotación de anticoccidianos?

Sí, la rotación de anticoccidianos se practica y además hay muchas explotaciones que lo hacen de una forma bastante efectiva. Pero, a veces se interponen en el camino las formas tradicionales de pensar, los viejos hábitos, las consideraciones del costo y las presiones para lograr un desempeño óptimo a corto plazo, para poder desarrollar una estrategia sustentable a largo plazo. En otros casos, los avicultores sin saberlo pueden rotar un producto o combinación de productos diferente sin darse cuenta que tiene una estructura molecular similar al anticoccidiano que usaban con anterioridad.

Efecto de la forma subclínica de la coccidiosis

Los brotes agudos de coccidiosis pueden resultar en diarrea y mortalidad graves, pero por fortuna, estas situaciones son raras en las granjas avícolas progresistas, en las que se usan los anticoccidianos de forma rutinaria.

En la mayoría de las granjas avícolas comerciales, el problema más común es la coccidiosis subclínica de bajo nivel. Esta forma de la enfermedad puede con facilidad desarrollarse cuando los productos pierden gradualmente su eficacia y de forma lenta minan las tasas de crecimiento y de conversión alimenticia, así como la uniformidad de la parvada. Tanto en ponedoras como en reproductoras, también baja la producción y calidad de los huevos.

La coccidiosis de bajo nivel es costosa y predispone también a las parvadas a disbacteriosis, enteritis necrótica, dermatitis gangrenosa y otros problemas de salud costosos.

¿Cuánto tiempo se pueden usar los ionóforos sin que pierdan su efectividad?

Eso varía de granja en granja e incluso de caseta en caseta. Sin embargo, por regla general, no debe usarse la misma clase de ionóforo por más de seis meses consecutivos. En ese momento, el productor debe rotar a una clase diferente de ionóforo (por ejemplo, de monovalente a divalente), a un anticoccidiano sintético o incluso a la vacuna.

Uso de los anticoccidianos sintéticos

Los anticoccidianos sintéticos que se han dejado descansar bien, son altamente efectivos contra cepas de tipo silvestre de coccidia que pueden surgir cuando pierden efectividad otros anticoccidianos en el alimento. Cuando se usan con criterio, los anticoccidianos sintéticos pueden ayudar a restablecer el programa de manejo de coccidiosis y dejar al productor que empiece limpio con una nueva estrategia de rotación. 

Sólo hay una salvedad: los sintéticos han demostrado ser altamente proclives a la resistencia, por lo que es importante usarlos con criterio y programar suficiente tiempo de descanso entre tratamientos. Por ejemplo, si se usa un anticoccidiano sintético como parte de un programa de limpieza enfocado a las cepas de campo de Eimeria, es mejor limitar su uso a no más de tres meses. Si se usa el producto sintético en un programa dual con otro tipo de anticoccidiano, puede ser aceptable hasta los 4.5 meses. De cualquier forma, a menudo se recomienda dejar descansar el anticoccidiano sintético hasta por 20 meses, para conservar su eficacia en parvadas futuras.

Page 1 of 1580
Next Page