El concepto de compartimentalización es una estrategia de sanidad animal propuesta por la Organización Mundial de la Salud, OIE, el cual todavía no está reconocido oficialmente. Sin embargo, cada día esta práctica de zonificar áreas específicas donde se manifiesta una enfermedad se está convirtiendo en un proyecto que si bien presenta grandes desafíos a la vez ofrece grandes oportunidades y soluciones para los productores avícolas y pecuarios tanto de nuestra región como a nivel mundial.
La temática de la OIE sobre la nueva estrategia sanitaria internacional está basada en combatir las enfermedades bajo tres bases fundamentales: zonificación, compartimentalización y recomendaciones específicas para cada producto animal establecidas en análisis de riesgo. Actualmente, cuando se producía un brote de alguna enfermedad animal que constituía un riesgo para la el área pecuaria internacional, se realizaba un cierre de fronteras de todo el país que enfrentaba esta difícil situación. Aquí es donde, la Organización Mundial de la Salud defiende el tópico que hay que definir o limitar algunas fronteras que no tienen por qué ser las del país en su totalidad, zonificar el área donde está presente la enfermedad. Conjuntamente, compartimentalizar a través de medidas de bioseguridad dentro de una zona afectada en las diferentes unidades productivas. Por supuesto que es preponderante confiar en los servicios veterinarios oficiales de cada país. En definitiva, hay que evaluar y considerar que no todos los productos son peligrosos o riesgosos, de esta manera se puede seguir comerciando, obviamente con aquellos que no presentan peligro alguno para los consumidores.
La Organización Mundial de la Salud es firme y reitera con certeza que para erradicar enfermedades animales, lo principal es contar con una estrategia sanitaria óptima y personal especializado, basado en una mayor coordinación entre las organizaciones privadas e entidades gubernamentales, para realizar una gestión efectiva que acredite y certifique el trabajo efectuado ante el mercado doméstico y el comercio internacional.
Esta estrategia ha demostrado ser muy eficaz en las regiones donde se ha implementado, lamentablemente no existe un reconocimiento oficial a esta práctica, ya que los países importadores necesitan que los productos de origen animal estén libres de enfermedades y por otra parte los consumidores desconocen la eficiencia de esta nueva estrategia y además manifiestan desconfianza ante ésta.
Sin lugar a duda, hay que tener en consideración y abordar este tema de compartimentalización, el cual tiene una significativa relevancia para la región, desde todo punto de vista, ya que permitirá lidiar y enfrentar de una forma más eficiente cualquier problema sanitario que se pueda manifestar en el futuro.
El concepto de compartimentalización es una estrategia de sanidad animal propuesta por la Organización Mundial de la Salud, OIE, el cual todavía no está reconocido oficialmente. Sin embargo, cada día esta práctica de zonificar áreas específicas donde se manifiesta una enfermedad se está convirtiendo en un proyecto que si bien presenta grandes desafíos a la vez ofrece grandes oportunidades y soluciones para los productores avícolas y pecuarios tanto de nuestra región como a nivel mundial.
La temática de la OIE sobre la nueva estrategia sanitaria internacional está basada en combatir las enfermedades bajo tres bases fundamentales: zonificación, compartimentalización y recomendaciones específicas para cada producto animal establecidas en análisis de riesgo. Actualmente, cuando se producía un brote de alguna enfermedad animal que constituía un riesgo para la el área pecuaria internacional, se realizaba un cierre de fronteras de todo el país que enfrentaba esta difícil situación. Aquí es donde, la Organización Mundial de la Salud defiende el tópico que hay que definir o limitar algunas fronteras que no tienen por qué ser las del país en su totalidad, zonificar el área donde está presente la enfermedad. Conjuntamente, compartimentalizar a través de medidas de bioseguridad dentro de una zona afectada en las diferentes unidades productivas. Por supuesto que es preponderante confiar en los servicios veterinarios oficiales de cada país. En definitiva, hay que evaluar y considerar que no todos los productos son peligrosos o riesgosos, de esta manera se puede seguir comerciando, obviamente con aquellos que no presentan peligro alguno para los consumidores.
La Organización Mundial de la Salud es firme y reitera con certeza que para erradicar enfermedades animales, lo principal es contar con una estrategia sanitaria óptima y personal especializado, basado en una mayor coordinación entre las organizaciones privadas e entidades gubernamentales, para realizar una gestión efectiva que acredite y certifique el trabajo efectuado ante el mercado doméstico y el comercio internacional.
Esta estrategia ha demostrado ser muy eficaz en las regiones donde se ha implementado, lamentablemente no existe un reconocimiento oficial a esta práctica, ya que los países importadores necesitan que los productos de origen animal estén libres de enfermedades y por otra parte los consumidores desconocen la eficiencia de esta nueva estrategia y además manifiestan desconfianza ante ésta.
Sin lugar a duda, hay que tener en consideración y abordar este tema de compartimentalización, el cual tiene una significativa relevancia para la región, desde todo punto de vista, ya que permitirá lidiar y enfrentar de una forma más eficiente cualquier problema sanitario que se pueda manifestar en el futuro.
