La energía es el componente más costoso en las dietas de animales de alto desempeño. Debido a su alta densidad energética, las grasas y los aceites son fuentes importantes de energía en la formulación de los alimentos balanceados. Desde el punto de vista económico, es de gran interés el mejoramiento en el aprovechamiento de la energía a partir de estas materias primas.
Por lo tanto, se pueden utilizar emulsificantes nutricionales y con ello buscar mejorar la digestibilidad de la grasa y la eficiencia en el uso de la energía. Esto resultará en un menor costo del alimento y contribuirá a una producción animal más económica y sustentable.
Emulsificante nutricional
Las sales biliares son emulsificantes naturales. También actúan como emulsificantes naturales los monoglicéridos que se forman en el intestino después de la hidrólisis de la grasa. No obstante, la capacidad de estos emulsificantes naturales puede constituir en sí un factor limitante para la digestión de la grasa.
Los animales jóvenes cuentan con una producción limitada de sales biliares, por lo que en las primeras etapas de la vida también es limitada la digestibilidad de la grasa. Además de esto, las características de la grasa de la dieta y la cantidad de ésta añadida, pueden restringir la digestibilidad, al igual que en animales más viejos.
Hay diferentes características de la grasa que explican la diferencia en la digestibilidad. En general, los ácidos grasos saturados (encontrados principalmente en las grasas animales) se digieren con menos facilidad, en comparación con los ácidos grasos insaturados (como en las grasas vegetales). Los niveles altos de ácidos grasos libres limitan la digestibilidad.
El uso de un emulsificante nutricional constituye una herramienta eficaz para mejorar la digestibilidad de la grasa. Obviamente, el efecto positivo de añadir dichos emulsificantes es más marcado en las grasas menos digestibles, pero también pueden observarse efectos muy positivos en las grasas muy digestibles (como el aceite de soya).
Importancia del equilibrio hidrofílico-lipofílico (HLB)
HLB quiere decir el equilibrio hidrofílico-lipofílico, parámetro utilizado para elegir el emulsificante óptimo en cada aplicación específica. Un emulsificante con un HLB bajo es más liposoluble (lipofílico) y uno con un HLB alto es más hidrosoluble (hidrofílico).
Debido a que los animales consumen casi el doble de agua que de alimento, el intestino es un ambiente muy acuoso. El objetivo de un emulsificante nutricional es optimizar la emulsificación y la formación de micelas en el intestino; por ende, es preferible un emulsificante con un HLB alto (hidrofílico).
Proyecto de investigación en Brasil
Hay muchos estudios publicados que han mostrado los beneficios de un emulsificante nutricional. A fin de comprender el efecto con más detalle, se estableció un amplio proyecto de investigación en pollos de engorde. El proyecto es parte de un programa de doctorado y una cooperación entre la Universidad Federal de Lavras en Brasil y Orffa. El estudiante de doctorado, Levy Teixeira, llevó a cabo una serie de pruebas bajo la supervisión del profesor Antonio Bertechini.
Primero, se hizo un total de tres pruebas para investigar el efecto del emulsificante nutricional en la digestibilidad de nutrientes y la energía metabolizable en pollos de engorde. La digestibilidad de la grasa puede verse influida por diferentes variables, las cuales se tomaron en cuenta. La cantidad y el tipo de grasa son variables importantes, así como la edad del animal.
Para investigar los efectos del nivel de inclusión de la grasa, se formularon dietas con nivel crecientes de aceite de soya (0 por ciento, 1.5 por ciento, 3 por ciento, 4.5 por ciento y 6 por ciento). Se probó cada nivel de aceite con y sin emulsificante, lo cual se hizo en dos dietas basales (diferentes composiciones de dietas). También, para evaluar el efecto de la fuente de la grasa, se hizo un arreglo de dos tipos de aceite (aceite de soya y grasa avícola).
Se analizaron la digestibilidad de nutrientes y la energía metabolizable (EMAn) para aves jóvenes (de 14 a 21 días) y viejas (de 35 a 42 días), con base en el método de recolección de excretas totales.
Resultados de la investigación
Los resultados mostraron que el emulsificante mejoró significativamente la digestibilidad de la materia seca y la grasa, lo que resultó en una energía metabolizable más alta, tanto para las aves jóvenes como para las viejas (se muestra la información de las aves viejas en la gráfica 1).
Las pruebas adicionales mostraron que no hubo efecto de la composición de la dieta. En ambos tipos de dietas (dieta vegetal y dietas con subproductos de origen animal) se obtuvieron efectos positivos comparables del emulsificante. De la comparación entre el aceite de soya y la grasa de aves puede concluirse que el emulsificante fue efectivo en ambas fuentes.
Como seguimiento a las pruebas de metabolismo, se realizó una prueba de desempeño para validar las mejoras de energía obtenidas. Como control positivo, se formuló un programa de alimento basal con un nivel práctico de grasa y de energía. La dieta de iniciación contenía 2 por ciento de aceite de soya y la de finalización 4 por ciento. Después, se formuló un control negativo con un contenido energético más bajo. El contenido energético de la dieta de iniciación se redujo en 40 kilocalorías por kilogramo y la dieta de finalización en 75 kcal. Estas reducciones de energía se basaron en los resultados obtenidos en la prueba de metabolismo, que se lograron al reducir las inclusiones de aceite de soya.
Como tercer tratamiento, el control negativo se suplementó con el emulsificante para evaluar si podía compensarse la reducción de energía. Esto se desarrolló con dos composiciones de dietas diferentes: la dieta 1 hecha de materias primas solamente vegetales (maíz y harina de soya) y la dieta 2 con maíz, harina de soya y harina de carne y hueso. Los resultados se muestran en la gráfica 2.
Como se esperaba, la reducción de energía en las dietas de control negativo resultó en un crecimiento menos eficiente, como lo muestran las conversiones alimenticias más altas (gráfica 2). La adición de emulsificante pudo compensar la reducción de energía y recuperar la conversión alimenticia al nivel del control positivo. Las dietas con menos energía se formularon con menos aceite de soya y por ende tuvieron un costo de formulación más bajo.
Este trabajo confirma que añadir un emulsificante puede ser una herramienta práctica para nutriólogos de pollos de engorde para reducir el costo del alimento.
Conclusión
En conclusión, el emulsificante analizado mejora la digestibilidad de la materia seca y la grasa, y también mejora la energía metabolizable en dietas de pollos de engorde. Esto da al nutriólogo la oportunidad de formular dietas con un nivel de energía más bajo, sin comprometer el desempeño, lo que resulta en costos de alimento más bajos y una producción animal más sostenible.
GRÁFICA 1
Gráfica 1. Energía metabolizable aparente (EMAn) en dietas con inclusión creciente de aceite de soya, con y sin el emulsificante (*p<0.05).
GRÁFICA 2
Gráfica 2. Conversión alimenticia del control positivo (CP), control negativo (-40 kcal en iniciación y -75 kcal en crecimiento) y control negativo + grupos de emulsificantes.
