La organización independiente Protección Animal Mundial (WAP, por sus siglas en inglés para World Animal Protection) contrató con la firma Ipsos un estudio de comportamiento de consumidores latinoamericanos que se adelantó con 2,700 personas en cuatro países, en el primer trimestre de 2016. A mediados de diciembre, la ONG compartió con Industria Avícola los resultados finales de dicho estudio, del cual reproducimos algunas de sus conclusiones más relevantes.
Una de ellas es que el factor calidad es el más importante en la decisión de compra de productos de origen animal, y pese a que se asocia el bienestar animal a la calidad, este ítem se encuentra en “la sexta posición entre los requisitos de los consumidores entrevistados en Brasil, Chile y en México y sube al quinto lugar en Colombia”. Acerca del conocimiento sobre producción con bienestar animal, dos de cada tres brasileños declararon desconocer la forma como se crían los animales cuya carne consumen. En México opinaron lo mismo el 57 por ciento de los entrevistados, contra el 64 por ciento de los chilenos y el 66 por ciento de los colombianos.
Los jóvenes de 18 a 29 años, en general, tienen mayor preocupación con los métodos de sacrificio de los animales, y por países, el que más preocupación manifestó fue México (62 por ciento), seguido de Brasil con 58 por ciento. Para Chile fue un 30 por ciento. Nueve de cada diez brasileños declararon creer que animales producidos en un sistema de bienestar producen carne de mejor calidad.
Todos los entrevistados también dijeron creer que el sistema de producción de carne que se preocupa con el bienestar animal es más sostenible. Cerca de 70 por ciento de los entrevistados de todos los países investigados consideraron que los productos que poseen sello de producción con bienestar animal son más caros.
Finalmente, la carne de pollo se ubicó dentro de la segunda opción preferida de consumo en los cuatro países (detrás de la carne bovina), a excepción de México, donde fue primera sobre la de res.
