Maíz y soya en 2018, y un poco más allá

Paul Aho nos da su visión de cómo podría evolucionar el mercado del maíz y la soya para alimentos avícolas en los próximos años.

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campo maíz amarillo, corn

Después de realizar varios análisis y de consultar su “mejor bola de cristal para adivinar el futuro”, como bromeó en su presentación, el reconocido analista Paul Aho habló del mercado de granos en el último Congreso Latinoamericano de Avicultura, en Guadalajara, el pasado septiembre.

Reservas de granos

Para Aho, “lo más importante al pensar en los granos son las reservas mundiales”. Cuando las reservas son bajas, generalmente hay precios altos, y a la inversa, cuando las reservas son altas, se presentan precios bajos. Esto siempre se presenta en forma de ciclos, aunque no de una manera muy regular, lo cual se debe a que en situaciones como la actual −de reservas de muy altas−, se desincentiva la producción de maíz y se incentiva su uso, lo que tarde o temprano lleva a precios más altos.

En situaciones como en 2012 de precios altísimos, existe el desincentivo de usar maíz y el incentivo para producirlo, y así sucesivamente. De acuerdo con Aho, “estamos en el pico del ciclo de reservas, o sea en el precio más bajo del ciclo”. Al ver las reservas de Estados Unidos, “creo que estamos en el mejor momento de todos para comprar grano”.

Factor etanol

Entre 2003 y 2012 el uso del maíz para etanol en Estados Unidos aumentó con rapidez. Cada vez se destina un mayor porcentaje de la cosecha a este combustible. Por fortuna −dice Paul Aho− la producción de etanol es estable, lo cual es mejor a que aumente. “A mí no me gustaría ver que se usara el maíz para producir etanol”, pero está consciente de la importancia que este rubro tiene.

Es de esperarse que China no haga lo mismo que Estados Unidos −de producir etanol a partir de maíz−, aunque ya se habla de eso. 

Otra cosa que ayuda a la avicultura es que crece más la producción de maíz fuera de EUA: “cuanta más competencia, mejor para nosotros”. De esta forma, el mundo tiene cada vez más maíz. Argentina produce más, en particular a partir de 2015, y Brasil ha aumentado muchísimo, con excepción del año pasado. 

Ucrania, que en una época fue el granero del mundo, Aho espera que vuelva a tener ese papel destacado. 

Maíz a corto y mediano plazo 

A corto plazo, habrá abundante producción de maíz. El precio tocará fondo, a unos US$125 dólares por tonelada en Chicago. 

A mediano plazo, “creo que es fácil pronosticar que va a haber menos oferta y más demanda, gracias a los precios bajos y luego al alza, o sea que estamos tocando fondo y va a empezar a aumentar”. Después de haber llegado a US$300 por tonelada en 2012 en Chicago, y de llegar al punto mínimo en este momento, “creo que para 2018, 2019 o 2020 va a empezar a subir de nuevo”. 

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Sequía y rendimiento 

“Siempre hay que hablar de la posibilidad de una sequía, sobre todo en Estados Unidos, que es el productor más grande”. La probabilidad de que haya una es la misma todos los años, del 18 por ciento, o sea, 82 por ciento de probabilidades de que no haya sequía. De esta forma, el pronóstico más certero es que no va a haber. 

En cuanto al rendimiento del maíz, de 1970 a 2017 ha habido cinco sequías, las cuales no se presentaron en un número predeterminado de años, a veces vienen juntas y a veces separadas. “Es como echar los dados todos los años”. 

En este mismo período, se observa que el rendimiento ha aumentado de 75 bushels por acre a 175 bushels por acre. “La genética del maíz es casi tan buena como la de los pollos”. 

La soya 

Al igual que el maíz, hay una mayor producción y también tocan fondo los precios (por lo menos en dólares). Asimismo, de manera similar al maíz, sube la producción más rápido fuera de Estados Unidos, lo cual también es bueno para la avicultura. 

La producción de soya en el Cono Sur −Argentina, Brasil, Paraguay y Bolivia−, aumenta a gran velocidad. El único problema con el Cono Sur es que se puede detener y esperar que haya variabilidad en el crecimiento año tras año. No obstante, la tendencia de la producción es al alza, igual que la reserva mundial, que llega a un máximo histórico. 

Otro factor muy importante es saber qué hace China, pues es un importador muy sobresaliente. De importar casi nada de soya en 2001, hoy llega casi a los 100 millones de toneladas al año. 

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Soya a corto y mediano plazo 

A corto plazo, habrá abundante producción de soya, igual que el maíz, y se encontrará a US$330 por tonelada en Chicago. “No va a mejorar del punto donde estamos ahora (septiembre de 2017)”, pues se está tocando fondo. 

A mediano plazo y, al igual que el maíz, habrá menos oferta y más demanda, y los precios irán al alza. Alrededor de 2012/2013, el precio de la harina de soya por tonelada en Decatur era de más de US$500. En la actualidad se encuentra por debajo de los US$350, cifra que subirá en los próximos años. 

“Así que, no es mal momento para empezar a pensar en los futuros de granos”, señala Aho.

Lea el reporte completo en Industria Avícola Enero 2018

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