La producción de proteína animal mantendrá su tendencia de crecimiento en 2018, en especial para las carnes vacuna y porcina, pero en cuanto a los alimentos de origen avícola se espera que registren guarimos inferiores a los esperados al cierre de la actual vigencia. La proyección fue publicada recientemente por la consultora holandesa Rabobank y difundida en un cable de la agencia noticiosa EFE.
En el global, el aumento en la producción de proteína animal “se dará en todas las regiones, una vez más superando el promedio de los diez años. Esta fuerte alza seguirá siendo impulsada de manera protagónica por Brasil, China y Estados Unidos”. En 2018, se espera que la carne de res crezca por tercer año consecutivo, y que el cerdo experimente un año más de expansión significativa.
En lo que respecta a la carne de ave, Rabobank prevé que “también la producción avícola crezca, pero disminuirá ligeramente respecto a 2017. La incertidumbre en 2018 vendrá de evolución de los distintos acuerdos comerciales como el NAFTA, Brexit y la relación comercial entre EEUU y China, a lo que se suman de cuestiones de bioseguridad, como influenza aviar”.
Por regiones, el negocio avícola tendría estas variables, según la consultora: En América del Norte, la producción continuará creciendo, pero el acceso a los mercados comerciales será un área de incertidumbre; en Suramérica, Brasil y Argentina aumentarán principalmente la producción avícola y porcina; en Europa, el acceso a los mercados de exportación es cada vez más importante para los procesadores, a medida que aumenta la producción; en China, el suministro de aves se mantendrá en una línea similar, con el suministro de aves blancas disminuyendo y otras especies en aumento; y en Asia Suroriental, la producción avícola seguirá reduciendo en respuesta al exceso de oferta.
