Con una producción superior a los 1.5 millones de toneladas y una ingesta promedio anual de 32.8 kilos, la preferencia de los colombianos por el pollo no declinó a lo largo de 2017. Según una investigación realizada por la firma consultora Target Insight, “la preferencia por esta carne pasó del 36 por ciento en el 2015 al 40 por ciento en el 2017; es decir, se ganaron cuatro puntos porcentuales”.
El informe fue destacado por el diario bumangués Vanguardia Liberal, que resaltó lo siguiente: “históricamente, en el país se tenía una demanda de pollo media o moderada. Sin embargo, en la actualidad se tiene un consumo fuerte; es decir, cuatro a cinco veces por semana, segmento que pasó del 23 por ciento al 28 por ciento. La media es superior a tres veces por semana”.
De acuerdo con el impreso, la variable que incidió en el repunte de esa franja es que la carne de pollo es la más económica del mercado, pues “la economía ocupa el primer lugar de razones de preferencia, tiene el 39 por ciento para esta medición y crece respecto a la medición del año 2015, del 34 pasó a un 39 por ciento”.
Respecto a las partes del pollo preferidas, el estudio concluyó que la pechuga "es la presa por excelencia con más demanda y con mayor frecuencia. Se reporta una compra de pechuga del 71 por ciento, pierna muslo y pollo entero (35 por ciento) y ala con el 29 por ciento”.
En cuanto al consumo se encontró que “la pechuga sigue en el primer lugar en frecuencia con el 33 por ciento, seguida de pierna muslo con el 24 por ciento, pollo entero con el 12 por ciento y alas con 29 por ciento”.
Igualmente, se consigna en el informe que “por lo menos tres de cada 10 amas de casa compran alas con mayor frecuencia, pero no porque les guste, sino porque les toca (precio, preferencia de niños y jóvenes en algunas preparaciones)”. De los derivados, las salchichas de pollo son las más demandadas.
