A pesar de las expectativas, el 2018 no ha comenzado bien para la industria avícola brasileña debido a las dificultades —que aparentemente continúan creciendo— tanto en su mercado nacional como en el extranjero.
Todo apunta a que varios productores avícolas brasileños podrían estar enfrentando dificultades financieras, se están aplicando restricciones en los mercados extranjeros y el mercado interno está en peligro de tener un exceso de oferta.
A finales de febrero, la compañía BRF, el segundo mayor productor avícola del país, lanzó resultados financieros peores de lo esperado, lo cual estuvo seguido de llamados a reemplazar su Junta de Directores.
Las pérdidas en la compañía aumentaron a BRL1,100 millones (US$337.4 millones), de BRL367 millones el año anterior. Tan solo en el cuarto trimestre de 2017, las pérdidas fueron de BRL784 millones, mucho mayores que los BRL442 millones registrados en el cuarto trimestre de 2016.
El vicepresidente de operaciones globales de la compañía, Helio Rubens Mendes dos Santos Jr., renunció a los pocos días de la publicación de los resultados, y su salida se produjo a raíz de una serie de cambios en el personal clave en el último año.
La Junta de Directores de BRF tendrá el 5 de marzo una reunión extraordinaria convocada a pedido de dos de los mayores accionistas de la compañía. Sobre el particular, la Junta de Directores argumentó que estos accionistas —los grupos de fondos de pensiones Petros y Previ— también son parcialmente responsables del bajo rendimiento de la compañía.
Posición vulnerable
Estos resultados financieros peores de lo esperado han hecho que los precios de las acciones de BRF alcancen su nivel más bajo en cinco años. Entre finales de enero y finales de febrero, el precio de estas acciones cayó de BRL36.29 a BRL28.67. Comentaristas han dicho que esta puede ser la valoración correcta para la fuertemente endeudada compañía.
Lo que depara el futuro para BRF no está claro, pero pareciera ser una racionalización cada vez más vulnerable o, al menos, pareciera que necesita un cambio cultural significativo.
Arabia Saudita y exportaciones
Los problemas de BRF y de Brasil no terminan ahí. Desde que el escándalo de Operación Carne Débil, de la Policía Federal de Brasil, rompió el año pasado, la industria ha estado reconstruyendo gradualmente su posición en los mercados de exportación, pero esto puede haberse topado con un nuevo obstáculo.
El 1 de marzo, Arabia Saudita —que junto con China conforma uno de los principales mercados de exportación de Brasil— anunció que ya no importaría carne de aves que estén aturdidas.
Por esta razón, se cree que el principal productor avícola brasileño, JBS —que también tiene sus propios problemas—, tiene un número importante de contenedores listos para su envío que no pueden abandonar los puertos, y es probable que BRF se encuentre en una posición similar.
La Asociación Brasileña de Proteína Animal (ABPA) pensó que estaba negociando para revocar la prohibición, pero, dado que Arabia Saudita está ansiosa por fortalecer su propia industria, está por verse si estará dispuesta a escuchar.
Si la prohibición continúa, el producto brasileño destinado a ese mercado tendrá que venderse en otro lugar, y si se desvía al mercado interno, podría deprimir los precios, causando más dificultades a los productores locales que se encuentran en una posición lejos de ser fuerte.
Otro motivo de preocupación para la industria brasileña es el enfrentamiento de acusaciones de competencia desleal desde China. BRF y JBS se encuentran entre las empresas señaladas por China.
Los envíos de enero bajaron
De otro lado, cifras de ABPA revelan que las exportaciones de carne de pollo para enero de este año se ubicaron en 330,900 toneladas, lo cual es 8.8 por ciento inferior al obtenido en ese mes en 2017.
Entre los mercados que registraron un descenso significativo se encuentra la Unión Europea, donde las preocupaciones sobre Salmonella, que ha sido particularmente difícil de controlar en algunas partes de Brasil, han debilitado la capacidad de la industria brasileña para responder a la demanda.
