Los ajustes pequeños en los sistemas de la cerda lactante y de la maternidad pueden tener impactos espectaculares en el desempeño de toda la vida.
Está bien documentado que la edad y el peso al destete tienen un gran impacto sobre el desempeño de toda la vida. Estos resultados muestran el beneficio de aumentar la edad al destete, no solo en la producción de carne de cerdo del sistema, sino en mayores ingresos por cerdo.
También es importante el peso al destete en mejorar el desempeño posterior a este. Una evaluación comercial en Canadá mostró que el aumento del peso al destete de 3.8 kg a 6 kg mejoró el desempeño posterior al destete a los 42 días en 4.2 kg o el equivalente de 45 g/día para 1 kg de mejora en el peso al destete. Esto está respaldado por el trabajo realizado en el Prairie Swine Center que mostró que por cada 1 kg extra de peso al destete hubo un mejoramiento en la ganancia diaria promedio (GDP) de 40 g/día en la maternidad.
No sólo es el beneficio visto a lo largo de la maternidad, sino también en las unidades de finalización que informaron que 1 kg extra en el destete resultó en 4.2 kg a las 20 semanas de edad.
Logro de altos pesos al destete
Estos resultados muestran que, como sabemos, el mejoramiento de la edad y peso al destete mejora el desempeño consiguiente. Es importante la atención a la cerda lactante para garantizar que se logren pesos altos al destete para la edad. Aunque son importantes el peso y la edad al destete, dos estudios de la Universidad de Leeds del grupo de Helen Miller mostraron la importancia del crecimiento temprano posterior al destete sobre el consiguiente desempeño del cerdo.
En el primer estudio, hubo una fuerte correlación entre el peso al destete y la tasa de crecimiento en la semana uno sobre el desempeño consiguiente posterior al destete. Su influencia es muy similar y su impacto es aditivo.
Como, tanto el peso al destete como la ganancia diaria promedio a la semana uno después del destete tienen el mismo efecto sobre el peso al día 20, debe dársele más atención tanto a las prácticas de manejo que promueven el alto consumo de alimento en esa primera semana después del destete, como a la maximización del peso al destete en sí.
El segundo estudio de la Universidad de Leeds (Isley et al., 2001) constó de un estudio similar, pero que investigó el peso al nacer, peso al destete y la tasa de crecimiento a los 20 días sobre el desempeño de toda la vida. Dicho estudio mostró que el mejor factor de predicción del peso al sacrificio en orden descendente fue la ganancia diaria promedio posterior al destete al día 20, seguida del peso al destete y el peso al nacer, y que el peso al destete con la GDP posterior al destete al día 20 fueron los mejores factores de predicción del peso al sacrificio.
Esto está sustentado por investigaciones que mostraban la importancia de la tasa de crecimiento de una semana posterior al destete sobre los días al mercado con cerdos que daban mejores resultados que 115 g/ día en la semana uno para llegar al mercado 10 días más rápido que los que tenían menos de 115 g/día [Pollman (1993)].
Mejoramiento del peso al mercado
En el estudio de Leeds fue posible determinar qué se requería en el peso al nacer, peso al destete o tasa de crecimiento a los 20 días para mejorar el peso al mercado en 1 kg.
Al ver los parámetros de cambio que se requieren para aumentar 1 kg extra al sacrificio, se pueden lograr tanto la GDP a los 20 días como el peso al destete (mejoramiento del 5% en el desempeño promedio) a través del manejo y nutrición, al tiempo que es más difícil lograr el aumento del peso al nacer en 10%. Cabe recordarse que se ha informado en numerosos estudios que la ganancia extra proveniente de la maternidad resulta en ganancia extra en la finalización, en la que 1 kg en la maternidad se traduce en 2 a 4 kg en el sacrificio.
En promedio, la industria equipararía 1 kg extra de la maternidad en 2.5 kg al sacrificio o 2.5 a 3.5 días de ahorro para llegar al mismo peso al sacrificio. Por lo tanto, el manejo de la maternidad puede mejorar el desempeño posterior al destete: si podemos lograr tan solo un 5% de mejoramiento en las primeras 3 semanas después del destete, podemos ganar 1 kg extra de peso vivo para el productor al mercado.
De esta forma, esto muestra que si podemos incrementar el consumo de alimento en las 3 semanas posteriores al destete y por lo tanto la ganancia, entonces los cerdos deberán llegar al sacrificio más rápido o producir más carne de cerdo en el mismo período, proporcionando ganancias al porcicultor.
Consumo de alimento
Es de todos conocido que el consumo de materia seca cae inmediatamente después del destete conforme el cerdo deja de consumir la leche de la cerda y empieza con alimento seco en un ambiente extraño. Este es un factor de estrés común que reduce el consumo de alimento que se necesita superar, pero que puede complicarse conforme dicho consumo varía radicalmente de unidad en unidad, dependiendo de otros factores de estrés que haya en el sistema. Esto se debe a que el apetito es sensible a todo tipo de estrés, malestar y enfermedad.
Por ejemplo, las unidades de núcleos con pocos factores de estrés presentan consumos de alimento mayores, mientras que las unidades que tienen mucho estrés (enfermedades y mal manejo) presentan consumos más bajos.
Si estamos en la situación de bajo consumo de alimento y bajo desempeño de la maternidad debido a enfermedades y manejo, ¿se puede acaso cambiar esta situación para mejorar?
Se ha mostrado que al mejorar el consumo de alimento hay una correlación positiva entre el aumento del consumo de alimento, el mejoramiento de la integridad intestinal (altura de las vellosidades) y mejoramiento de la ganancia posterior al destete: factores todos que son de desear que se logren.
Ejemplo práctico
Un ejemplo práctico del manejo que mejora el desempeño fue cuando cinco granjas comerciales que padecían de diarrea y mortalidad por E. coli tenían cerdos destetados en su sistema existente de producción o en las instalaciones de investigación y desarrollo con un excelente manejo y una política de todo dentro, todo fuera.
Todo el alimento dado a los cerdos en las granjas comerciales y a los de las instalaciones de investigación y desarrollo era el mismo, por lo que se eliminó cualquier factor del alimento en la evaluación.
Consumo de agua
El consumo de agua es crítico en la estimulación del uso del alimento, ya que hay una relación positiva entre el consumo de alimento y el del agua. Al entrar a la maternidad, a los cerdos que les falte familiarizarse con el alimento y el agua les puede llevar tiempo ajustarse a su nuevo ambiente. Los estudios han mostrado que puede llevarse aproximadamente 35 horas para que el 85% de los cerdos en el corral encuentren agua y alrededor de 30 horas para que el 90% de los cerdos encuentre el suministro de alimento.
Las estrategias para mejorar el consumo de agua pueden ser en la forma de selección y manejo de los bebederos. Es importante asegurar que el bebedero esté a la altura correcta, a la altura de los hombros o espaldilla del cerdo más pequeño del corral. Además, debe haber un número mínimo de bebederos con relación a los cerdos de 10:1, aunque nunca se debe dejar a los corrales con una sola fuente de agua. Como resultado, el mínimo debe ser dos bebederos por cada 10 cerdos por corral. Pueden añadirse fuentes adicionales de agua después del destete, para lo cual es común el uso de bebederos de pavos durante este período.
Además, el tipo de bebedero puede incidir sobre el consumo de agua y de forma más importante, en el desperdicio de ésta. Un estudio reciente (Torrez et al., 2008) mostró que el tipo de bebedero sí afectaba el consumo de agua, así como su desperdicio. De tres tipos de bebederos, el de niple y el de tazón con pivote mejoró el consumo de agua, aunque en este estudio el de niple en particular mostró mayores niveles de desperdicio (aproximadamente 50%) en comparación con el tazón con pivote (alrededor del 20%).
Medir las tasas de flujo
Aunque es importante el manejo de los bebederos, también lo es garantizar que la tasa de flujo del agua satisfaga las necesidades de los cerdos. ¿Cuán seguido debemos medir la tasa de flujo entre lotes de cerdos? La tasa de flujo es fundamental para los lechones, ya que si está demasiado baja, el cerdo se va a apartar del bebedero antes de haber satisfecho sus necesidades diarias. De ahí que, se reduce la ganancia de peso (consumo de alimento) y conforme se reduce la tasa de flujo, el consumo de agua se torna insuficiente. Por lo general se recomienda que inmediatamente después del destete, debe tenerse como objetivo un mínimo de 500 ml por minuto, aunque 750 ml por minuto es el nivel óptimo de este período. No debe excederse la tasa de 1,000 ml por minuto. Al verificar las tasas de flujo, es importante verificarlas en diferentes zonas de la maternidad, ya que una reducción de la presión puede incidir en la tasa de flujo.
Ha habido trabajos dirigidos a mejorar el consumo de agua, en los que se han usado sabores y proteína globulinas para tratar de lograr esto con cierto éxito, especialmente en el período de 24 horas posteriores al destete.
Cuando el consumo de agua es bajo, debe verificarse la calidad del agua, y puede determinarse el nivel de sólidos disueltos totales como prueba inicial. Esto proporcionaría una guía del nivel de sales disueltas en el agua, y si son >1,000 ppm, sería recomendable realizar más pruebas (NRC, 1998).
Manejo adecuado del programa de alimentos
Es importante alimentar el programa correcto establecido por el nutriólogo y no subalimentar al cerdo y perder desempeño, o sobrealimentarlo, lo que resultaría en mayores costos de lo necesario. Un ejemplo de esto lo mostró el Prairie Swine Centre (Whittington et al., 2005) en una unidad de cerdos en la que los investigadores midieron el alimento usado comparado con lo presupuestado. Mostró que la unidad estaba subalimentando la fase 1 y fase 2 en aproximadamente 5 kg de alimento. Esto se vio reflejado en que los cerdos estaban 4.5 kg por debajo del peso objetivo de salida de la maternidad. Después de corregir el programa, los pesos de salida de la maternidad estuvieron más cercanos, solamente 0.8 kg detrás del objetivo. En esta unidad, se calculó que aunque hubo un costo extra relacionado con la mayor cantidad de alimento de fase 1 y 2, el programa corregido aumentó las utilidades en $1.85 por cerdo o $25,000 dólares al año en una unidad de 600 cerdas.
Un área que parece diferir, dependiendo del país, es si los productores quieren alimentar a kg o a días. Es importante, de ser posible, garantizar que el lechón consuma el presupuesto de alimento en kg, en lugar de cambiar el alimento debido a los días. Es fundamental dar el alimento correcto por animal en ese período intermedio después del destete, para asegurar que los lechones no se retrasen del peso objetivo. A menudo, esto significa que se van a necesitar monitorear los cambios de alimento por corral o densidad, aunque la ventaja es un crecimiento eficaz en costos. Todavía existe el debate de si hay algún beneficio de colocar a los cerdos en lotes por tamaños al destete y luego alimentarlos al peso inicial.
El trabajo hecho por Schinkel et al. (2003) mostró que el 80% superior de los cerdos que pasan por la maternidad tiene una GDP similar, mientras que el 20% inferior presenta una caída en la ganancia. Por lo tanto, es importante, de ser posible, tratar a ese 20% inferior de los cerdos como una población separada y mediante un método proactivo, minimizar el impacto negativo que estos animales pueden tener sobre el sistema de producción. Por lo tanto, se indica que en unidades comerciales típicas, que debido al aspecto práctico, el 10% inferior de cerdos debe agruparse y alimentarse con un programa separado. Al hacer eso, reciben más del programa inicial de fase 1 en comparación con sus compañeros de camada más pesados. Esta práctica de manejo fomenta el crecimiento del cerdo más ligero y reduce la variación de la maternidad.
La reducción del desperdicio de alimento rinde frutos
Con precios altos de alimentos balanceados como los que ha habido en años recientes, es básico que se minimice en la granja el desperdicio de alimento. Calculo que en la granja promedio se desperdicia el 10% del alimento suministrado. Con base en una granja de 500 cerdas, es decir, 300 toneladas de alimento al año (a 6 toneladas por cerda y progenie al año), y un costo promedio de $300 a $400 dólares por tonelada de alimento y 21 cerdos comercializados al año, esto equivaldría a un costo de $8.57 a $11.42 por cerdo comercializado. Incluso, un desperdicio del 2% equivale a $1.71 o $2.28 dólares por costo de cerdo. Estos cálculos, aunque son estimaciones, dan una fuerte indicación de lo que puede costar el desperdicio de alimento a una granja en términos de costo adicional de producción y de cómo una estrategia en la granja de reducción del desperdicio de alimento puede hacer mejorar el costo de producción en dicha unidad.
El manejo es una de las áreas críticas que como nutriólogos tratamos de abocarnos para garantizar que se obtenga el mejor desempeño del alimento. Hay muchos parámetros para recordar y dar seguimiento, pero a menudo es difícil hacerlo en la granja. Con este fin, las dietas primarias rinden una herramienta para usarse en la granja que proporciona una guía de prácticas y requisitos de manejo. Es básicamente una Rueda de Gestión que el productor puede girar al peso del cerdo y ver qué requisitos de manejo se necesitan. La ventaja es que el productor cuenta con una herramienta a mano para hacer marcas fácilmente en las guías de manejo para un peso específico del lechón de maternidad.
Con la Rueda de Gestión que el productor puede girar al peso del cerdo y ver qué requisitos de manejo se necesitan. La ventaja es que el productor cuenta con una herramienta a mano para hacer marcas fácilmente en las guías de manejo para un peso específico del lechón de maternidad. – Pig International
