El Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y América Central no trajo el crecimiento prometido tras su firma hace cinco años, afirmó el investigador del Centro de Investigaciones sobre Inversión y Comercio del Salvador, Sr. Benjamín Ramos.
Lo que sí ha logrado el tratado es generar mayores niveles de dependencia de las importaciones desde Estados Unidos, señaló el Sr. Ramos al evaluar los resultados del lustro de vigencia del pacto.
Explicó que el acuerdo fue incapaz de ser el motor de desarrollo de la economía salvadoreña, con niveles incluso de decrecimiento, ni amortiguar los impactos de la grave crisis internacional desatada en 2008 en Estados Unidos.
Sobre el comercio, Ramos indicó que más importante que el aumento de exportaciones, lo relevante es el gran crecimiento de las importaciones desde la potencia estadounidense.
Indicó que las inversiones extranjeras no fueron hacia el sector agropecuario para propiciar su desarrollo como se dijo hace cinco años, sino hacia otros que no son estratégicos para las grandes mayorías del país.
Asimismo, el Sr. Ramos precisó que el sector financiero, registró 348% de incremento de las inversiones extranjeras, en los cinco años de vigencia del TLC.
Añadió que en el otro extremo, el agro salvadoreño apenas recibió el 0.6% de la inversión extranjera directa, que fue nula del 2007 al 2009, de acuerdo con el Banco Central de Reserva.
Resumió que esos recursos se focalizaron en ciertos sectores dominados por unas pocas manos, grandes empresas nacionales y transnacionales.
Recordó que al momento de negociar el pacto, no se tuvieron en cuanta las grandes asimetrías entre las economías de Estados Unidos y el resto de los países, lo que impide competir en condiciones de equidad.
