La semana pasada, Merial llevó a cabo su Global Avian Forum en Barcelona, España. Ante más de 500 personas de 70 países, Nan-Dirk Mulder, analista sénoir de Rabobank en Holanda, empezó la sesión al hablar del panorama global de la industria avícola.
En su presentación, Mulder habló sobre las perspectivas del mercado a largo plazo de la producción avícola, así como de temas clave de inversión y del panorama estratégico de la industria.
Panorama actual de la industria avícola
La industria de la proteína animal en el mundo se ha beneficiado de los precios más bajos de los alimentos balanceados, hasta la reciente sobreoferta. A corto plazo, hay sobreoferta de maíz y soya, y se ve que habrá buenos precios del alimento balanceado.
En términos generales, seguirá en crecimiento el mercado de la carne, aunque a un paso más lento. Sin contar a China, se pronostica que el pollo crezca a una tasa del 2.2 por ciento en 2016, además de que seguirá siendo la carne más consumida. La carne de cerdo crecerá a una tasa del 0.7, la carne de res al 0.4 y los huevos se pronostica que crezcan al 2.1 por ciento.
Hay solamente un país que es la excepción: China, en donde la tendencia es la opuesta, ya que ahí la carne de cerdo es la más consumida. Se calcula que en ese país la carne de cerdo crezca en 2016 al 1.5 por ciento, pollo al 1.6 por ciento, huevos al 0.4 y la carne de res al 2.8 por ciento. Pero las cosas también podrían cambiar ahí, debido a que los problemas de inocuidad alimentaria y la influenza aviar han tenido mucho impacto en el mercado chino.
Mulder dijo que, “La influenza aviar se convierte en un desafío global, en una preocupación global. Es un riesgo que la industria necesita manejar en los próximos años”.
Se ve muy bien el panorama a largo plazo: habrá una mayor demanda del 65 por ciento de carne de aves en los próximos 20 años y un 50 por ciento más en huevo. De la demanda de proteína del mundo, el 60 por ciento provendrá de Asia. Pero ¿en dónde se llevará a cabo la producción con recursos limitados de tierra? A Asia le faltan recursos.
En la actualidad, las nuevas tierras agrícolas que hay se ubican como sigue: 45 por ciento en el África subsahariana, 10 por ciento en Brasil, 7 por ciento en Argentina y 11 por ciento en otros países latinoamericanos. Hay ya muy pocas tierras libres en el hemisferio norte. Por lo tanto, Mulder pone a África como la futura zona de producción agropecuaria.
En términos de costo, la producción asiática de pollo es de 30 a 50 por ciento más cara que la brasileña, sin tomar en cuenta el estatus sanitario de ambas regiones. Por lo tanto, Mulder hace énfasis en que “el comercio va a ser más importante” que nunca, aunque hay volatilidad en las condiciones del mercado global. De hecho, ya está sucediendo: la mayor parte del comercio se va al Medio Oriente, China y Asia en general.
Los analistas de Rabobank predicen crecimiento de la producción avícola en todas las regiones del mundo. Para Latinoamérica, pronostican que en 2016 Brasil tendrá una tasa de crecimiento del 3.5, México del 1.9 por ciento, Colombia del 0.7 por ciento y Argentina del 0.7 por ciento.
Inversiones en producción avícola
Si aumentan los ingresos, también lo hace el consumo, como el de los productos avícolas. Por lo tanto, parece razonable invertir en el consumo avícola. No obstante, habrá que tener en cuenta que las preocupaciones del consumidor son las que impulsan los cambios que mueven a las industrias del mundo, en especial en los mercados de economías desarrolladas. Pero los cambios se diseminan por todos lados. Se han internacionalizado asuntos tales como la producción libre de antibióticos o los huevos de gallinas sin jaulas. Estos cambios que ha impulsado el consumidor se han diseminado a economías emergentes. De esta forma, ¿será que el pollo premium representa una oportunidad de mercado? Tal vez así lo sea en ciertas economías.
China es el caso más concreto de cuánto pueden afectar las preocupaciones del consumidor, tales como con los casos de influenza aviar y de la inocuidad. Pero Mulder dice que “China se va a recuperar, pero de otra forma”. No hay duda de que, en cualquier mercado, la clave es volver a granjearse la confianza.
En Asia, la atención de los inversionistas va pasar de China al Sureste de Asia, a países tales como Indonesia, las Filipinas e incluso Myanmar. En Europa, los países del Este crecen, tanto en términos nacionales como de mercado de exportación. Polonia es el productor europeo que crece más rápido (alrededor del 11 por ciento).
Pero una vez más, Mulder hizo énfasis en el África subsahariana, una región que está en pleno despegue. “Es la nueva frontera en las inversiones avícolas globales. No era así hace cinco años. Incluso, algunas partes presentan un crecimiento del diez por ciento. Las cadenas de supermercados, especialmente de Suráfrica, abren sucursales al norte”, lo cual le da una nueva cara al mercado en esa zona.
Impacto de la influenza aviar
Para mitigar el riesgo de influenza aviar, los importadores van a tener más dependencia de pocos proveedores, pero va a haber recién llegados en perspectiva. Se presentan oportunidades para países como Ucrania, Argentina y Rusia para pollo enteros, pechuga y cortes.
La influenza aviar está cambiando el suministro de reproductoras en términos de globalización de la distribución y compartimentalización, al tiempo que hay programas locales para reducir la dependencia de las importaciones.
Hacia el futuro
Al mirar al futuro en el panorama de la producción avícola mundial, Mulder dijo que hay muchas compañías avícolas de países emergentes que ya se ubican en la lista de los principales productores. De tal forma que ha cambiado la perspectiva. Ya no sólo son compañías de naciones desarrolladas.
Va a continuar la internacionalización de la industria cárnica. En particular, la industria avícola se mueve a Brasil, Tailandia o incluso Rusia, pero se moverá a países de África, o a Indonesia y China.