Héctor Alonso de Hoyos, presidente de la Cámara Nacional de Comercio de México, le dijo a Radio Zócalo que solicitará a congresistas su intervención “ante el Gobierno federal en solicitar un freno al nuevo impuesto que quieren imponer al pollo importado que es el producto que más consume la gente”.
La propuesta de arancel del que habla el dirigente gremial consiste en 25.7 por ciento del valor declarado, lo que a su juicio “causará efectos muy negativos a la economía de las familias, porque son quienes lo consumen, ya que es el producto de la canasta básica que pueden adquirir”.
Este posible cambio impositivo que sin duda impactaría el costo al detal del pollo, coincidió con el anuncio conjunto en pro del control de precios emitido por Profeco (Procuraduría Federal del Consumidor) y UNA (Unión Nacional de Avicultores, entidad que agrupa la totalidad de productores de huevo y pollo).
Así lo registró el matutino Proceso, medio que tituló “Profeco y avicultores acuerdan fortalecer mecanismos para evitar abusos en precios de pollo y huevo”. México es el país con el consumo per cápita de huevo más alto del mundo, con más de 23 kilogramos por persona al año.
Este producto avícola representa hasta 35 por ciento promedio del total de proteína consumida en la dieta de las familias mexicanas. De acuerdo con datos de la UNA, en lo que se refiere al pollo, éste representa alrededor del 25 por ciento del total de proteína consumida, en promedio.
Voceros de la Profeco consideraron que “es indispensable mantener una estrecha colaboración para que el mercado trabaje eficientemente a favor de los consumidores y evitar distorsiones que induzcan a alzas injustificadas, por lo que pidió a los productores mantener canales abiertos de información para evitar abusos”.
La UNA se constituyó en 1962 y está integrada por 42 asociaciones locales o regionales que aglutinan a más de 400 empresas y 3 secciones especializadas, que agrupan a todas las empresas productoras de carne de pollo y de huevo en el país.