El consumo per cápita de proteína animal paso en Uruguay de 98.7 a 99.1 kilos en el último año, crecimiento en el que poca incidencia tuvieron las carnes de origen aviar. Así lo registró el diario montevideano El País, citando el más reciente informe entregado al respecto por parte del Instituto Nacional de Carnes (INC).
El alza se presentó principalmente en la ingesta de carne de res y cerdo, en tanto se registró un estancamiento para pollo y cordero. “El año pasado los uruguayos consumieron 200 gramos más de carne bovina respecto a 2015, llegando a una ingesta de 57.8 kilos por habitante frente a 57.6 kilos anteriores”, señaló el matutino.
Asimismo, se destacó que “hubo una leve caída en el consumo de carne aviar, pasando de 20.4 kilos por habitante a 20 kilos. La baja no se debió a suba de precios pues en el primer semestre de 2016 hubo una caída en los valores de la carne aviar volcada al abasto interno. El incremento más significativo se registró en el consumo de cerdo, que subió 1,1 kilos y pasó de 16.9 kilos a 18 kilos, con lo cual se acercó mucho al pollo”.
Al otro lado del Río de la Plata, la firma IES Consultores confirmaba para el periódico El Zonda que en “la producción de carne aviar aumentó 6.3 por ciento interanual en los primeros siete meses del año y alcanzó 1,236,000 toneladas, frente a las 1,163,000 toneladas de 2016, mientras las exportaciones subieron casi 24 por ciento en el mismo período”.
Estos registros arrojaron entonces un dato de consumo mejor al de la vigencia pasada: 1,156 miles de toneladas, un 5.8 por ciento por encima de las 1,092 miles de toneladas del año anterior. “El consumo per cápita, en el acumulado a julio de 2017, presentó un incremento del 4.6 por ciento con respecto a igual período de 2016 y alcanzó los 45.8 kg por habitante frente a los 44 kg del acumulado a julio de 2016”.