Eggnovo es una pequeña empresa con sede de Villatuerta (Navarra, norte de España) que desde diciembre de 2014 produce y vende complementos alimenticios para el tratamiento y prevenciĂłn de dolencias como la artritis y la osteoporosis, bajo la marca Ovomet. Estos complementos contienen principalmente ácido hialurĂłnico, colágeno, glucosamina, queratina, lisozima y factores de crecimiento B, todos compuestos extraĂdos de la membrana blanca que separa la clara del huevo de la cáscara; es decir, provienen de una materia prima que por lo general es desechada.
Solamente en España, cada año se generan unas 17,000 toneladas de cáscaras de huevo, “cuyo fin suele ser el vertedero”. AsĂ lo informĂł el semanario Cinco DĂas, que destacĂł tambiĂ©n que Eggnovo ha logrado perfeccionar su proceso industrial y modelo de negocio gracias a que obtuvo dos patentes para equipos y procesos que permiten separar dicha membrana del resto de la cáscara, mediante un proceso mecánico que Ăşnicamente requiere agua como insumo adicional.
“Estas patentes las comparten con otras dos empresas en el mundo. Una está en JapĂłn y la otra en los Estados Unidos”, agregĂł el rotativo, que añadiĂł que Eggnovo comercializa tanto sus complementos como los dos inventos que facilita producirlos, como bienes de capital en Italia, Alemania, Reino Unido y Francia, “donde hay mucha más cultura de estos productos. Y tambiĂ©n en Polonia, donde el consumo de complementos alimenticios ha crecido un 23 por ciento”, segĂşn declaraciones entregadas por MarĂa Eugenia Sábada, gerente de la pequeña compañĂa.
“Los ovoproductores no saben qué hacer con las cáscaras de huevo y para nosotros ya no es un residuo, sino materia prima”, siguió explicando la empresaria, para quien Eggnovo y sus inventos “ofrecen intercambios en los que todos ganan: los productores se ahorran la tasa al vertedero y Eggnovo obtiene el recurso que necesita para fabricar de forma exclusiva en Europa dos tipos de complementos alimenticios”.
Para el consumidor final la ganancia radica, al parecer, en su salud. “Dolencias como la artritis o la osteoporosis se previenen y tratan a base de carbonato cálcico, que suele provenir de las canteras. Lo que Eggnovo ofrece es sustituir este por otro de origen natural, solo a base de cáscara de huevo, que es más fácil de absorber por el organismo y permite calmar el dolor de las articulaciones y regenerar el cartĂlago. Es un producto que aparte de paliar las consecuencias del envejecimiento, sirve para los practicantes de deportes muy intensos como el crosfit”, puntualizĂł Sábada.