En La Paz, Baja California Sur, se llevó a cabo la primera cumbre Open Wing Alliance México los días 19 y 20 de noviembre, en la que cinco grupos de protección animal se comprometieron a trabajar en conjunto y compartir tácticas y recursos para lograr un veto nacional a productores de huevo que confinen a las gallinas en jaulas.
Organizada por The Humane League (THL), la reunión contó con los representantes de las asociaciones Proyecto Gran Simio, Ánima Naturalis, Mercy For Animals e Igualdad Animal.
“Estamos ansiosos de comenzar a trabajar con nuestros colegas en otras organizaciones para finalmente ponerle fin a las jaulas para las aves”, comentó Ana Ortega, directora de THL en México. “Juntas, nuestras voces son más fuertes que antes y a la industria no le quedará otra opción más que escucharlas”.
De acuerdo con el comunicado de THL, en el sistema de aviarios con jaulas, el más utilizado en México, se llegan a albergar hasta diez mil gallinas en una instalación. De cuatro a ocho pasan toda su vida productiva, que es de dos años, en jaulas de alambre que miden 30 cm de ancho por 35 de largo (medidas recomendadas en el Manual de buenas prácticas pecuarias en la producción de huevo para plato, 2a. edición 2016), algunas veces apiladas hasta en diez pisos. Esto le deja a cada ave menos espacio que el área de una tableta electrónica y les impide realizar cualquiera de sus comportamientos naturales como lo es perchar, escarbar o incluso extender sus alas; provocando estrés y conductas agresivas como el canibalismo.