El gobierno japonés ordenó la suspensión de todos los envíos de carne de la prefectura de Fukushima, después de que se comprobara que los animales habían consumido alimento contaminado con altos niveles de cesio radiactivo.
El descubrimiento se ha sumado a las preocupaciones de los consumidores por la seguridad de los alimentos después de incidentes de contaminación en vegetales, té, leche, mariscos y agua debido a las filtraciones de radiación tras el terremoto y tsunami que afectó la planta nuclear en Fukushima.
Aunque la carne de Fukushima, 240 kilómetros al norte de Tokio, representa sólo 3% del total de Japón, algunos de los cortes afectados fueron enviados a grandes supermercados en la capital del país y sus alrededores y fueron servidos en jardines infantiles en Yamagata, en el noroeste de Fukushima.
El gobierno aún está realizando pruebas para determinar si la carne estaba contaminada. También pidió a todas las prefecturas del país que investiguen si sus granjas usaron alimentos contaminados.
"El gobierno está haciendo todo lo posible para descubrir a dónde se envió la carne de vacas afectadas y, cuando esa carne sea encontrada, realizar las pruebas", dijo el jefe de Gabinete, secretario Yukio Edano, en una conferencia de prensa.
Agregó que el Gobierno chequeará todo el ganado de las áreas evacuadas alrededor de la planta nuclear de Fukushima Daiichi por posible radiación, además de las granjas en esa prefectura.
La planta nuclear de Fukushima, de Tokyo Electric Power, continúa filtrando radiación más de cuatro meses después del desastre.
"Aunque hay muchos estudios sobre los efectos de consumir alimentos radiactivos entre humanos, no hay estudios sustanciales sobre este ganado en Japón", dijo Akira Otsuyama, profesor asociado en la Universidad de Salud Ocupacional y Ambiental, en Japón.
El gobierno de Fukushima, que ha comprobado ya más de 33,000 cabezas de ganado, tiene previsto inspeccionar las 4,000 granjas de Fukushima para el 3 de agosto.